En teoría la entrega del hospital es una buena noticia, en el 2010 su reconstrucción original por un monto de RD$ 66.4 millones dotó al municipio de un centro con servicios esenciales como internamiento, emergencia, cirugía, laboratorio y diagnóstico, más adelante en el 2021 otra intervención sumó alrededor de RD$ 20 millones para habilitar una emergencia más adecuada a las necesidades actuales, el monto de la remodelación que hoy se inaugura no aparece en los portales de acceso a la información pública.
En infraestructura de salud esta inversión tienen sentido, Pimentel necesitaba y merece un hospital Felipe J. Achecar funcional.
El problema es la forma en que se presenta esta entrega, porque para preparar el escenario se asfaltó apenas un pequeño tramo de la calle Independencia, menos de 100 metros de pavimento colocado a la carrera y tan a la carrera que hasta taparon un filtrante del INAPA, afectando un drenaje que ya estaba en malas condiciones y que nunca debieron tocar sin criterio técnico
Ese detalle que muchos verán como mínimo describe perfectamente una costumbre vieja: intervenir lo que se ve y dejar intacto lo que realmente importa, mientras la calle sigue destruida, el drenaje comprometido y las necesidades urbanas sin atender, el interés está en que la fotografía oficial salga bonita
El hospital es necesario, claro que sí, pero su valor no depende solo de paredes nuevas y pintura fresca, también necesita un entorno digno para llegar a él, porque el deterioro crónico del municipio no se tapa con un acto protocolar
Pimentel necesita soluciones completas, no remiendos rápidos, un hospital no reemplaza una ciudad bien cuidada, ni una calle maquillada reemplaza el respeto
Y al final, lo que más duele no es el asfalto mal puesto, sino la idea mal puesta de que la gente no se da cuenta.
Pues sí se da cuenta, y hace rato.
Por: Bienvenido Checo,- @BienvenidoR_D
@bienvenidocheco
bienvenidocheco@hotmail.com
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